Apple es una marca con una base fundada por millones de usuarios. Sus productos y presentaciones, contribuyen a “evangelizar” y crear lealtad a la compañía. En Japón, Apple es una de las empresas más fuertes y con mayor posicionamiento en el mercado, y las abrumadoras ventas del iPhone en el país del sol naciente, lo corroboran.
Las ventas del iPhone en Japón son realmente abrumadoras. Aunque la compañía que lo distribuye en exclusiva allí no ha dado cifras, se estiman que se han vendido cerca de 5 millones de unidades de teléfonos desde el lanzamiento del terminal en 2008, ocupando cerca del 70% del mercado adjudicado a los smartphones. Según los analistas, pese a las dificultades por la ausencia de determinadas características (como sintonizador de TV de serie), el teléfono de Apple ha marcado el ritmo de la industria de telefonía móvil, motivando un cambio de tendencia en el mercado de una forma significante. Uno de los ejemplos que ponen, es que cualquier japonés puede comprar decenas de artículos y accesorios en la mayoría de tiendas de electrónica de las principales ciudades, lo que supone un apoyo “extra” al soporte de Apple y de terceras compañías al teléfono.
Aún así, no hay que ignorar a ciertas voces críticas. Muchos de los analistas consultados, dejan claro que aunque el teléfono de Apple ha vendido bien, el mercado de los smartphones es realmente pequeño (apenas ocupa un 10% del total de las ventas de teléfonos móviles), y la masiva incorporación de terminales con sistemas Android, están minando poco a poco el reinado del iPhone desde su llegada en 2008. Por si fuera poco, publicaciones como Wired, comentan que el iPhone es casi un teléfono odiado, sobre todo por la obligación a contratar tarifas de datos de internet con los planes de contrato. De todas formas, parece que la llegada del iPhone 4 es un soplo de aire fresco.
Japón es uno de los mercados más complicados y duros para casi cualquier compañía occidental. Es muy difícil intentar vender productos de fuera del país, pues el japonés medio profesa una gran lealtad y sentimiento hacia los objetos que se han fabricado y diseñado dentro de sus fronteras. Microsoft y su Xbox no funcionaron (y siguen sin funcionar) por la misma razón. Pero Apple una vez más, rompe esquemas.
Fuente: movilzona.es