¿Quién no ha jugado nunca a un videojuego? Sería raro, pero casi todos, o hemos visto, o hemos jugado a algún que otro juego. Ya seamos viejos aficionados o recién llegados, los videojuegos ocupan una gran parte del tiempo de nuestro ocio y diversión. Apple, con la llegada del iPhone, dio rienda suelta a la creatividad proveniente del mundo del videojuego, y ahora está recogiendo sus frutos.
A día de hoy, los videojuegos son disfrutados por personas de todas las edades, dejando su uso de ser algo exclusivo para cuatro frikis, a convertirse una rutina habitual en el ámbito doméstico y social de la gran mayoría de personas. Todos (o al menos la gran mayoría) disfrutan de su pequeña parcela en el ámbito de los videojuegos en su día a día. Ya sea jugando a determinados títulos sociales y familiares para consolas de sobremesa como Wii o a las últimas superproducciones épicas para Xbox 360 o PlayStation 3, los videojuegos son parte de nuestro entretenimiento, convirtiéndose en una pieza importantísima en la diversión de millones de personas alrededor del globo. La industria del videojuego factura y genera más beneficio que la cinematográfica, y los últimos lanzamientos obtienen más ingresos que los estrenos más sonados y publicitados de Hollywood. ¿Quién no ha oído hablar de Grand Theft Auto? ¿Y de Call of Duty? ¿O de Super Mario? ¿Y qué me dicen de Sonic? Las principales sagas y figuras del mundo del videojuego son iconos importantísimos dentro de la cultura popular, y son reconocidos tanto por jóvenes y niños, como por adultos y aficionados de más edad. Y no solo hablamos de ser venerados por los aficionados, sino también por aquellos jugadores más casuales y esporádicos. Con la salida del primer iPhone, allá por 2007, Apple abrió la posibilidad a la entrada de todo tipo de aplicaciones y juegos. Si bien la App Store no comenzó a expandirse y a funcionar hasta pasado un tiempo desde el lanzamiento del teléfono de Apple, la idea general estaba bien clara: brindar al público la oportunidad de poseer, jugar y disfrutar su teléfono. Los juegos llegaron al poco tiempo, y con la irrupción del iPhone 3G, comenzaron a pasar de ser pequeñas producciones simples y sencillas (y a la estela de los limitados teléfonos de la época) a verdaderas obras de arte llenas de detalles y funcionalidades. Las principales compañías comenzaron a volcar sus esfuerzos y desarrollos en proyectos importantes para las plataformas de Apple (iPhone y iPod Touch), llevando sus sagas y franquicias más famosas a los teléfonos y reproductores mp3 de medio mundo. Konami, Capcom, Ubisoft…Las grandes empresas veían como con una cantidad relativa de dinero, podrían duplicar (en el peor de los casos) sus inversiones. El negocio de Apple funcionaba, así como la App Store, que permitía publicar juegos no solo de las grandes editoras del sector, sino también los de los aficionados y usuarios que creían que tenían algo que decir en el mundo de los videojuegos. Todos conocemos el éxito de juegos como Angry Birds de Rovio, cuyo fama y repercusión ha traspasado la frontera del iPhone, y ahora cuenta con decenas de adaptaciones y versiones para otras consolas (así como secuelas anunciadas o una todopoderosa máquina de marketing detrás). Con el paso del tiempo, Apple llegó a ser consciente del poder mediático de su plataforma, que había conseguido llevar los videojuegos a gran parte del público que solía pasar de ellos, convirtiéndolo en aficionados y jugadores más que ocasionales. Con la llegada de Game Center de la propia Apple (que permite compartir logros y puntuaciones con otros jugadores), y de otras plataformas de juego online, los de Cupertino comenzaron a apoyar el juego en sus dispositivos, y empezaron a considerarlas consolas portátiles. Sí, consolas.
Steve Jobs fue muy claro en la Keynote de Septiembre. Las plataformas iOS tienen más usuarios y jugadores que las principales consolas portátiles del mercado. Los jugadores en sistemas iOS consumen más títulos y tienen un catálogo más amplio que el de cualquier otra consola jamás creada (incluso llegan a superar el volumen o el total de todas las consolas y títulos disponibles juntos en toda la historia). Grandes desarrolladores como John Carmack de ID Software, han apoyado la decisión de Jobs de sacar importantes juegos en iPhone, iPad o iPod Touch. Rage: Mutant Bash TV! ya está disponible, y es uno de los videojuegos más interesantes y divertidos de toda la plataforma. Por si fuera poco, el poderío técnico de las plataformas de Apple comienza a estar fuera de toda duda. Y no hablamos de juegos en tres dimensiones simples y molientes. Estamos hablando de grandes apartados técnicos, con efectos gráficos de última generación, y con las mejores técnicas de desarrollo tras ellos. Epic y su motor Unreal Engine 3 ya son parte oficial de toda la maquinaría videojueguística, y a títulos como Epic Citadel (espectacular demo técnica de las propiedades del motor) y al futuro Epic Sword nos referimos.
Muchos desean y esperan una futura consola de Apple. Pero dicha consola ya está entre nosotros, aunque quizás de una forma que muchos no esperábais. Las consolas de Apple son pequeñas, son consolas portátiles, y están en los bolsillos de millones de personas. Ah, pero… ¿habláis de consolas de sobremesa? ¿Y el Apple TV? ¿Lo habéis olvidado? Pues eso. Ya están aquí. Y tienen un futuro prometedor. Tiempo al tiempo.
Alberto González